Chignahuapan… tan cerca de Puebla y tan lejos de Dios y de la mano de la justicia, es una frase recurrente de empresarios, políticos y habitantes que padecen un Maximato del clan Rivera Nava desde hace 48 años, casi medio siglo.
Por algo es “Pueblo Mágico”.
Total qué son 50 años… nada.
Tiempo en que, amén de presidir el Palacio Municipal desde el abuelo, quien “heredó” la alcaldía a hijos, nietos y primos, se han hecho dueños de vidas y haciendas.
El poderío económico –y político- de Los Rivera les ha permitido poseer, comprar –o arrebatar- tierras, haciendas, aserraderos, casas, que los lleva a tener un clúster empresarial, especialmente en el ramo de la construcción.
Durante el reinado del PRI, fueron Virreyes.
Con Morena prosiguen con el título Virreinal.
Lo terrible para ellos, y sus demandas, es que “el gobierno no los ve, menos los escucha”.
Veamos quién inicia el empoderamiento de Los Rivera.
En 1975, Humberto Rivera Bonilla fue el primer alcalde del clan Los Rivera.
Para el trienio 1984-1987 tocó la “silla presidencial” a don Lorenzo Rivera Galindo, quien instauró el cacicazgo familiar.
-Pues-, don Lorenzo impuso a su hijo José Lorenzo Rivera Sosa para el periodo 1999-2002.
Y éste pasó la estafeta del Ayuntamiento a su familiar Raúl Rivera Loizaga, para la administración 2002-2005.
Para el lapso 2005-2008 asumió la alcaldía Saúl Rivera Sosa.
Y 2008-2011 fue para José Lorenzo Rivera Sosa.
Del 2014 al 2018 tocó a Juan Enrique Rivera Reyes.
Y 2021-2024 está Lorenzo Rivera Nava.
Sin olvidar:
Juan Enrique Rivera Reyes es Diputado Local por Chignahuapan.
Y Lorenzo Rivera Sosa -papi de Lorencito Rivera Nava-, además de haber sido dos veces alcalde, Diputado Local y Federal, dirigente estatal del PRI, ex delegado de SEDESOL y SEDATU, y actual delegado del Revolucionario Institucional en Morelos.
¡Qué bonita familia!
Admirable Maximato de los Rivera.
Del abuelo a los hijos, de los hijos a los primos.
O sea, la Tercera Generación Rivera gobierna Chignahuapan.
Quién dice que no se puede.
Sexenios van, sexenios vienen, y Los Rivera ahí están.
Y estarán.
Y continuarán.
Por los siglos de los siglos… amén.
Porque el primer Rivera que asumió la Presidencia Municipal fue durante el sexenio del gobernador Alfredo Toxqui Fernández de Lara.
Así, de Alfredo Toxqui a Miguel Barbosa, los Rivera reinan en la Sierra Norte.
Al igual que Los Lastiri Quirós y Los Márquez Martínez en Zacatlán.
Por algo están hermanados Chignahuapan y Zacatlán, municipios que los separan unos cuantos kilómetros.
Pero esa es otra historia.
Este pasaje histórico-político continuará.
Porque el desvío de recursos, compra de auditores, falta de pagos a proveedores, tala en aserraderos, de Lorencito Rivera Nava, está más que galopante.
¿Sabrá algo el gobernador Sergio Salomón Céspedes?
¿La Fiscalía General de la República?
¿La Auditoría General del Estado?
Al tiempo.
