Cruda, pero es real la cruda realidad…
El ejercicio de la política soporta “extraños compañeros de viaje”.
Amén que en política la fortuna cuenta –y mucho-, plasmó Maquiavelo.
Para algunos lo anterior es inaceptable.
Otros lo aprecian como pactar con “Dios y el diablo”.
El resto lo ve necesario para el ejercicio de la política y la gobernanza.
Ejemplos sobran.
Y vayan que sobran en ese andamiaje de “extraños compañeros de viaje”.
Mismos que van desde el lejano 1940 en la sucesión del general Lázaro Cárdenas, que por “circunstancias de la política” se decantó por el poblano Manuel Ávila Camacho e hizo a un lado a su amigo Múgica.
Y el general Ávila Camacho dio el paso trascendental en la historia política de México al dar por concluida la era militar al ceder la “Banda Presidencial” a los civiles, en 1946.
Qué decir de “extraños compañeros de viaje” en la sucesión del –poblano- Gustavo Díaz Ordaz hacia Luis Echeverría Álvarez, la cual pasó a leyenda, o realidad, con los trascendidos:
… “Me equivoqué con Echeverría”.
… “Luis desconoció a Gustavo”.
… “¿Por qué no autorizó que ‘enfermaran’ a Echeverría?”.
O bien, en la sucesión de 1994 de Carlos Salinas de Gortari que marcó un hito de tragedia, dolor y sangre con el asesinato del candidato Presidencial Luis Donaldo Colosio en Lomas Taurinas, Tijuana.
Lo que llevó a la candidatura exprés de Ernesto Zedillo Ponce de León –gracias al autor intelectual del franco/mexicano José Córdova-, quien ya sentado en el Despacho Principal de Los Pinos ordenó detención y encarcelamiento de Raúl Salinas, hermano de Carlos, mismo que decidió que su sucesor fuera Zedillo.
“LIMPIAN CAMINO A MIER”
El periodista Julio Hernández López en su columna Astillero -La Jornada-, escribió:
“EN PUEBLA SE ha producido un hecho judicial que pareciera “limpiar” el camino a Ignacio Mier, actual coordinador de los diputados federales de Morena, a la candidatura guinda a la gubernatura.
“Su socio en el diario Cambio, Arturo Rueda, fue encarcelado en mayo de 2022 bajo señalamiento de extorsión en 2015 al político priista Charbel Jorge Estefan Chidiac, a quien el director Rueda pidió 10 millones de pesos a cambio de “administrar su reputación” y no dar a conocer un video que perjudicaría al político priista.
“El cínico intento de extorsión quedó grabado en un video luego difundido en redes. Ayer, –miércoles pasado-, medios poblanos publicaron que Estefan había otorgado el perdón a Rueda, aunque éste enfrenta aún otras acusaciones.
“Rueda habría enviado una carta de disculpas a Estefan, quien aceptó el perdón “en concordancia con el nuevo clima político que vive Puebla”.
“Por lo pronto, la maniobra quita a Ignacio Mier una de las objeciones a su eventual postulación morenista al gobierno poblano”, fin de la cita.
La Jornada de Oriente –nota de Patricia Méndez- publicó también el pasado jueves:
“De acuerdo con versiones periodísticas, el otorgamiento del perdón por parte de Chidiac a Rueda sería parte de un acuerdo político mediante el que se le habría pedido al comunicador mantenerse al margen del próximo proceso electoral e incluso no radicar en la entidad poblana”.
Por cierto, fue el periodista Mario Alberto Mejía quien lo adelantó –miércoles 5- en su Quinta Columna:
“El diputado Charbel Jorge Estefan Chidiac otorgó hace unos momento el perdón al periodista Arturo Rueda a través de sus abogados en el Juzgado de lo Penal del Distrito de Cholula”.
Cruda, pero cierta la cruda realidad.
“La política y sus extraños compañeros de viaje”… ayer enemigos jurados, hoy las circunstancias los llevan a pactar.
Ambos se conocen, y bien.
Fueron “compañeros de viaje” durante el gobierno bartlista.
Al término, Mier y Estefan tomaron caminos diferentes.
Y 24 años después su andar político los lleva a reencontrarse.
Sin olvidar:
" Compañero de viaje " con Miguel Barbosa Huerta durante la campaña extraordinaria por el gobierno de Puebla 2019.
Ya instalado en Casa Aguayo, desconoció "compañero de viaje" , al lanzar feroz campaña contra él y su familia.
Estefan, "compañero de viaje" ¿Será transitorio o proseguirá durante la ruta 2024?
Vaya que es real.
El hombre y sus circunstancias…
Al tiempo.
