El lance del Ejecutivo Estatal Sergio Salomón Céspedes fue directo y sin ambages, sin protocolo ni diplomacia, duro y rudo hacia los transportistas agrupados en Antorcha Campesina:
“Que no nos pongan a prueba y tampoco que nos reten”.
Para añadir:
La aplicación de la ley es de ordenamiento general y las vías públicas son para que transiten, no para que sean tomadas.
Y advertir:
“No vamos a permitir ningún tipo de bloqueo, lo decimos con puntualidad, certeza y firmeza que debe tener el gobierno”.
Después del golpe –aviso o amenaza-, el gobernador sustituto matizó para dar paso al mensaje de “conciliación”:
“Estamos abiertos al diálogo. Está nuestra mano amiga abierta para la construcción”.
Más volvió a la carga al reiterar el ultimátum:
“Que no nos pongan a prueba y tampoco que nos reten”.
Lo anterior se dio previo a la marcha que realizaron ayer más de 4 mil transportistas adheridos a la organización Antorcha Campesina, a la que se sumaron rutas “Gómez Tepetino” de la región de Teziutlán, Atlixco, del Valle de Valsequillo; de la capital Ruta 1, 44 Amarillos, Volteos “Carmen Serdán” y diversas organizaciones civiles y ambientalistas, quienes demandaron “Sí la verificación obligatoria y gratuita”.
NO SE RETA, NI SE PONE A
PRUEBA AL GOBERNADOR;
QUE NOS ESCUCHE
La respuesta al mandatario estatal llegó a través de Ovidio Celis Córdova, dirigente de Antorcha en el Transporte, quien encabezó la marcha de El Gallito al Congreso del Estado para concluir con un mitin a las afueras de Casa Aguayo.
Debe quedar claro –muy claro-, “no se reta, mucho menos se pone a prueba al gobernador Céspedes Peregrina”.
Y que no se confunda, ni malinterprete, o trate de darse otro tinte a nuestra demanda.
“No es un reto, tampoco se pone a prueba al mandatario”.
“Para nada, eso es falso de toda falsedad”, asienta Ovidio Celis.
“Únicamente se le pide que nos reciba y nos escuche”.
Solicitamos un diálogo abierto y directo para que vea que nuestra demanda “no es un reto, muchos menos una amenaza”.
Lanza el SOS…
¡Basta de confrontaciones!
-Porque- “un estado no se gobierna a base de confrontaciones, de persecuciones y amenazas”.
Los transportistas estamos atravesando severa crisis económica al no tener un incremento a la tarifa durante más de 10 años, la cual se agudizó con la pandemia dos años más y pese al ralo incremento que dio el extinto gobernador Miguel Barbosa se evapora con el descuento a estudiantes, personas mayores y con discapacidades diferentes.
Además con el fracaso del programa de video-cámaras, que se tuvieron que adquirir; ahora con el pago de verificación, unidades con mínimo 10 años de antigüedad, lo que lleva a tener que renovarlas vía crédito bancario y que conlleva a pagar mensualidades altas.
Por ello, para nosotros es vital tener un diálogo con el mandatario, que nos escuche, que vea nuestra propuesta, que ponga en la mesa la suya y así llegar ambas partes a un acuerdo, expone Celis Córdova.
PUERTAS CERRADAS EN CASA
AGUAYO Y EN EL CONGRESO
Con tristeza –ayer- “no nos vieron, ni escucharon, mucho menos ninguna autoridad, representante gubernamental o del legislativo, nos recibió”.
Refiere:
“En la sede del Poder Legislativo las puertas estuvieron cerradas”.
“En la sede del Poder Ejecutivo las puertas no se abrieron”.
Miento y debo aclarar:
… “nos recibieron elementos de la Policía Estatal, patrullas, grúas y vallas”.
Por último, comenta a este espacio:
“Tenemos confianza que el nuevo gobernador abra las puertas al diálogo y mesas de consensos, que su gestión no tenga espacio para filias o fobias, porque la cerrazón es la consejera que lleva a la sinrazón”.
¿Qué sigue para los transportistas?
¿Diálogo?
¿Entendimiento?
¿Puertas cerradas?
¿Represión?
Al tiempo.
